La Junta de Castilla y León aprobó el día 26 de enero los mapas de las unidades básicas de ordenación del territorio (UBOST), el último trámite necesario para culminar el nuevo modelo de Ordenación del Territorio en la Comunidad, con la aprobación del proyecto de ley en el Consejo de Gobierno.
Las prioridades de este proyecto son aprobar el mapa de unidades básicas de ordenación y servicios del territorio de Castilla y León, garantizar los servicios públicos autonómicos en el medio rural, flexibilizar algunas cuestiones del modelo de Ordenación del Territorio y facilitar la aprobación de las Áreas Funcionales Estratégicas para, sobre estas, elaborar el Plan Plurianual de Convergencia Interior y regular el Fondo de Compensación Autonómico.
El proyecto de ley efectúa la aprobación del mapa de las Unidades Básicas de Ordenación y Servicios del Territorio, que se incluye como un anexo. En total, existirán en Castilla y León 193 unidades básicas de ordenación y servicios del territorio, 16 urbanas y 177 rurales. Cada una de ellas integrarán un promedio de 12,8 municipios y una población promedio de casi 6.460 habitantes.
El texto, según informa el Ejecutivo regional, garantiza el mantenimiento de los servicios públicos de competencia autonómica en el medio rural (incluso, en el caso de que actualmente existan dos centros de salud en una UBOST, explícitamente, se garantiza su mantenimiento) y, por otro, el volumen de prestación de servicios en cada una de las provincias. También garantiza el derecho de los municipios a constituir las nuevas mancomunidades de interés general y/o mantener las mancomunidades actualmente existentes, así como la continuidad de las Comunidades de Villa y Tierra y el derecho de todas ellas a recibir ayudas de la Administración de la Comunidad.
También se incluye la declaración del Área Funcional Estable de Benavente, y la modificación, incorporando a dos municipios, de las Áreas Funcionales Estables de Burgos y de Aranda de Duero, respectivamente.