20 de diciembre de 2012

Comunidad de Regantes Cabecera del Río Riaza

J.C.O. / Aranda - miércoles, 19 de diciembre de 2012

Ferduero ha aceptado la prórroga del pago de las subvenciones correspondientes al menos a 2012, 2013 y 2014, recuperando su montante en años posteriores una vez superado el bache.
 
 
La Asociación de Comunidades de Regantes de la Cuenca del Duero (Ferduero)ha alcanzado un preacuerdo con el director general de Producción Agropecuaria y Desarrollo Rural de la Junta , Jesús Gómez Sanz, de cara a garantizar el pago de las 25 anualidades de la subvención que comprometió la Administración regional a 29 comunidades de regantes de la Comunidad Autónoma consistente en el pago de dos puntos de interés de los créditos contratados para la modernización de regadíos.

Si bien el Ejecutivo autonómico anunció que de cara a cumplir los objetivos de déficit y estabilidad presupuestaria iba a revocar las ayudas al rechazar los regantes la propuesta inicial de congelar los pagos durante cuatro años por entender que se corría el riesgo de no retomarla una vez superado el periodo de ‘carencia’, según ha explicado a DB Restituto Velasco, presidente de la Comunidad de Regantes del Canal de Aranda y representante en Burgos, en una reciente negociación se ha encontrado una fórmula para no suprimir la aportación autonómica.

Una solución que pasaría por aceptar una prórroga del pago de las subvenciones correspondientes al menos a las anualidades 2012, 2013 y 2014, recuperando su montante en años posteriores. «La ayuda no se revoca, sino que se suspende temporalmente hasta el 2015 ó 2016. En este segundo año se retomaría con garantías, pero tras la firma de las nuevas adendas se reanudarán las conversaciones entre julio y octubre de 2014, cuando ya se esté empezando a confeccionar el presupuesto de 2015, para ver la posibilidad de adelantar un año la recuperación y si se pueden ir poniendo al día los atrasos, como queremos», explica Velasco.

El representante ribereño reconoce que hubiera sido más satisfactorio que se hubiera seguido percibiendo con normalidad la ayuda pactada. Sin embargo no oculta su alegría por el preacuerdo alcanzado, que deberá ser ratificado por las altas instancias del Ejecutivo regional, ya que despeja la incertidumbre para las cuatro comunidades de regantes de la comarca afectadas -canales de Aranda, Guma, La Vid y Cabecera del Río Riaza, a los que, según sus cuentas, la Junta adeuda globalmente 2,86 millones de euros a lo largo de la próxima década. Un pago que, de no efectuarse, conllevaría un sobregasto de entre 30 y 60 euros anuales por hectárea al agricultor, y que, partiendo de la base de que algunos ya pagan hasta 240 euros/ha y la media ronda los 200, harían prácticamente inviables las explotaciones.

«El acuerdo sería mejorable pero hay que buscar una solución. Esperemos que la consejera no eche por tierra el acuerdo haciéndole ver que el campo no es como piensa ella, que da dos mil y pico euros de rendimiento por hectárea por el maíz, porque no es verdad. Estamos dispuestos a adelantar nosotros el dinero estos tres años, con mucho sacrificio, pero que piensen que estamos muy pillado con la modernización», explica Velasco.


RECORTE EN LA AYUDA


Otro apartado en el que habrá recorte es en la cuantía de la ayuda. La propuesta de Ferduero era que se tuviera en cuenta el importe certificado final de obra como base para el cálculo, en vez de la estimación directa, pero según indica Velasco, no lo aceptaron al completo. «La base de cálculo será el importe de ejecución material descontando redacción de proyecto, dirección técnica, seguridad y salud... Su idea es que ellos pretendían ayudar a financiar la obra y no al personal de la sociedad estatal Seiasa», indica. Asimismo, aunque desde la Junta no dijeron nada en contra de poder percibir las 25 anualidades, hablaron de u n importe máximo auxiliable «que puede ocasionar -indica- que la ayuda se acabe en el año 23 ó 24».

Ferduero ha convocado una junta de gobierno este jueves para analizar la negociación con la Junta. En cualquier caso, las adendas a los convenios se firmarían individualmente con las 28 comunidades de regantes afectadas, por lo que la decisión de firmarlas o no dependerá única y exclusivamente de cada una de ellas. La rúbrica está prevista antes de fin de año en un acto en Valladolid.


Artículo original en Diario de Burgos