21 de julio de 2012

Los cacos entran en el Ayuntamiento y en la Iglesia

Pasada la media noche del lunes, como si de un presagio se tratara, cantaban los gallos del picacho de los palomares: kikiriki cantaba uno, kikiriki contestaba otro ... y ladraban los perros: en el Picacho con tono uniforme y medio volumen: guau, guau, guau ... en la Calle Encarcelado con tono descendente: guau, guau, guau, guau ... en la Calle Nueva con tono ascendente: guau, guau, guau, guau, ... parece como si todos tuvieran "algo" que decir a "alguien" ... Quizás todos estaban sintiendo la presencia cercana de alguien o algo extraño, que a unos les hacía sentir temor y a otros la fuerza de su valentía ... Todo un concierto para los paseantes y una cantinela para los que intentaban conciliar el sueño ...

kikiriki, kikiriki ... guau, guau, guau ... guau, guau, guau, guau ...  guau, guau, guau, guau, ...
kikiriki, kikiriki ... guau, guau, guau ... guau, guau, guau, guau ...  guau, guau, guau, guau, ...
kikiriki, kikiriki ...guau, guau, guau ... guau, guau, guau, guau ... guau, guau, guau,guau, ...
...

Los mastines del molino pusieron el colofón a la serenata con su potente ladrido. Conocedores de su fuerza y seguros de sí mismos ningún extraño les intimida:


guau, guau, guau, guau, guau, guau, guau, ...














En la noche del pasado martes, los cacos forzaron las cerraduras del Ayuntamiento y de la Iglesia. Al parecer, accedieron al Ayuntamiento forzando la puerta de la terraza del bar, donde sustrajeron algunas cajetillas de tabaco. También forzaron la puerta principal, la de la Asociación San Bartolomé, la de entrada del bar desde el portalillo ...


Y en la Iglesia, también forzaron la puerta principal y la de acceso al interior, no tuvieron que forzar la de la capilla, ya que estaba abierta pues Construcciones y Excavaciones Arranz Hnos. está arreglando la sacristía. Se llevaron las monedas del cepillo de las velas y una radial y dos taladros de la empresa.
 

Cada vez son más frecuentes este tipo de delitos en la Ribera del Duero y también en nuestro pueblo, pues ya ha habido robos en las naves de César, en la de Jesús en dos ocasiones y en la casa de José Manuel. Parece que no les intimida hacer la faena en el centro del pueblo amparándose en la oscuridad y actuando en las horas durante las cuales el sueño es más profundo.