12 de mayo de 2015

Injertando en La Requina

Desde que en 1878 entrase la plaga de la filoxera en España y contaminase todos los viñedos, como lo había hecho anteriormente en Francia y otras zonas europeas, la única forma de combatirla es la plantación de viñedo sobre pie de vid americana, resistente a este insecto parásito.

Habitualmente se adquieren las plantas ya injertadas en vivero, sin embargo, la Compañía de Vinos Telmo Rodríguez, ha seguido desde que se implantó en la Ribera del Duero y en particular en Fuentemolinos, el método de plantación tradicional que consiste en plantar un pie o patrón de vid americana: vitis rupestris o vitis riparia, generalmente, resistentes al insecto de la filoxera. Al año siguiente de la plantación, se injerta sobre el pie o patrón americano una púa (trozo de sarmiento) con dos yemas, de la variedad que deseemos: habitualmente en Ribera del Duero la variedad predominante es la "tempranillo". 

Los sarmientos para el injertado los selecciona Valentín Madrigal en los viñedos que la dirección técnica de la bodega considera idóneos para la elaboración de sus vinos, preferiblemente durante los menguantes de enero y febrero, conservándolos en condiciones óptimas de temperatura y humedad en la bodega, hasta el injertado.

Una tarde de finales de abril hemos acompañado a Valentín y a los injertadores de El Toboso en el plantel de La Requina. (Muchas gracias a todos).





Previo al injertado se hacen las púas bien afiladas, con dos yemas, clasificándolas por tamaño, escogiendo la que tenga similar grosor al patrón.



Descubierto el patrón se corta en forma de púa y se inserta la púa en los cortes dados previamente al patrón. Posteriormente se ata con esparto y se tapa la planta injertada.