Ha terminado de llover y ha salido el sol. La mamá Mirlo aún tiene sobre su plumaje algunas gotas de agua. Por debajo de su cuerpo inmóvil asoma la cabeza una de sus tres crías.
Los Mirlos son una de las aves que más está progresando en el medio urbano en los últimos años. Los árboles y arbustos de jardines y patios, todavía deshabitados durante los inicios de la primavera son un lugar tranquilo para hacer su nido y sacar adelante su prole. Este año en Fuentemolinos hemos podido escuchar a este flautista madrugador en numerosas ocasiones en los árboles del Picacho y en la acacia de la Iglesia y hemos podido seguir la evolución de uno de los nidos.